Él no necesita verla,
sabe que está al otro lado de la cerca, que escucha música, que está recostada
en una reposera al lado de la pileta y que el sol de la hora de la siesta le
acaricia la piel.
Sabe que si se trepa a
un árbol y apunta sus binoculares va a ver en detalle su cabello corto, su
rostro perfecto y las gotas de sudor que se suicidan cayendo desde su frente a
su cuello, desde su cuello a sus pechos. No, no necesita verla para sentirse estimulado,
activado, excitado, por eso hoy, a diferencia de otros días, permanece junto a la cerca, se toca, se regodea
en el preludio. Olisquea el aire esperando que el viento le traiga el perfume
de ella, que le cuente a que huele esa piel, pero a su nariz sólo llega el aroma
de los tilos, de las lavandas y los jazmines que moran en el parque. Cierra los
ojos, se regocija con la brisa, la imagina
con su flequillo meciéndose suavemente sobre su frente, fantasea con soplarle
la nariz, después el cuello, después la nuca.
La música se detiene
y la voz de ella hablando por teléfono interrumpe la quietud de la tarde, su
voz es suave y pausada, un poco ronca y él se pregunta cómo serán sus gemidos, qué
tan fuertes sonarán sus gritos.
Él sabe que la desea,
que la reja del fondo está rota, él sabe que ella está sola. Él sabe.
¡Un malvado!, Me gustó el clima, te felicito.
ResponderEliminarConciso preludio, no necesitamos más para saber como acaba la historia. Me encanta tu poder de síntesis, con él logras que el lector fabule el desenlace sin que tengas que agregar una sola palabra más. Te envidio, yo no puedo, tengo verborrea incontinente, cuando empiezo no sé dónde he de acabar.
ResponderEliminarExcelente, como siempre. Un gran abrazo.
Ovidio a mi me pasa lo contrario me cuesta escribir largos.. Gracias por leer y por opinar, te mando un gran abrazo, nos leemos!
ResponderEliminarGracias Cecilia, estoy feliz de que te haya gustado, Saludos!
ResponderEliminarRealmente apasionante, tus palabras, deliciosas, pocas, las justas diría yo, van introduciendo al lector en el tema, el final del relato es libre, se sabe el camino pero aun algún imponderable podría suceder, el suspenso lo creas tu y cada uno de nosotros imagina, interactúa... Si que eres buena escritora tu, querida Renate. Felicitaciones. Un beso para ti.
ResponderEliminarFede, gracias por leer y comentar, me encanta que me vengas a visitar.
EliminarUn abrazo
Como siempre, muy bueno.
ResponderEliminarGracias LIli, besitos!
ResponderEliminarMe encanta ese poder de seducción de tus letras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegra que te gusten mis letras Maripaz! Un abrazo
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